FLAGSTAFF, Arizona - Las cuadrillas que combaten un incendio forestal de 4,000 hectáreas (10,000 acres) que amenaza cientos de hogares en los alrededores de la ciudad de Flagstaff Arizona, enviaron el martes aviones para conocer el alcance real del fuego.

Evacuaciones

Cerca de 10% del incendio, situado a las afueras de Flagstaff, fue controlado el lunes, pues los bomberos se enfocaron en proteger las casas en riesgo al cavar zanjas, retirar maleza seca y humedecerlas.

Durante el apogeo del incendio, nubes de humo negro y gris oscurecieron el cielo al norte de Flagstaff.

Llamas rojas se elevaban más de 20 metros en el aire. El humo obligó a los conductores de los caminos aledaños a encender sus luces delanteras en pleno día.

Las llamas alcanzaron los jardines de algunas casas y se acercó a otras, dijo Dugger Hughes, comandante de la emergencia, pero ninguna estructura se ha quemado. "Las casas se ven seguras por ahora", manifestó.

Los residentes de unas 750 casas siguen bajo órdenes de evacuarlas y el comisario del condado de Coconino Bill Pribil los exhortó a ser pacientes.

"En estos momentos, no estamos preparados para regresar a las personas a sus casas", declaró el lunes.

El calor, la poca humedad y los fuertes vientos han dificultado las labores de los bomberos, tanto en aire como en tierra.

Se cree que el incendio se originó por una fogata abandonada. Más de 800 bomberos combatían el incendio.