El camión volcó cuando intentaba adelantar a un pequeño autobús el viernes por la noche, cerca del poblado de Sange, a unos 30 kilómetros (20 millas) al norte de Uvira, una ciudad cerca de la frontera con Burundi, dijo Mana Lungwe, encargado de la empresa petrolera congoleña dueña del camión.

El vehículo empezó a derramar petróleo y acabó en llamas una hora después, dijo. Lungwe dijo que el conductor resultó herido en el accidente y fue transportado a una clínica local antes de que ocurriera la explosión.

Tras el accidente, “la gente acudió para intentar extraer el contenido del camión cisterna”, dijo Madnodje Mounoubai, vocera de la misión de paz de la ONU, que envió fuerzas para ayudar en la evacuación de los sobrevivientes.

Llevarse el combustible
“Comenzó el incendio y la gente que intentaba llevarse el combustible resultó muerta o herida”, dijo Mounoubai a The Associated Press. “Por ahora hay 220 muertos y 111 quemados, pero no se trata de la cifra final. Es una situación muy fluida”. James Reynolds, el vicedirector del Comité Internacional de la Cruz Roja en Congo, dijo que al menos 219 personas murieron ó 208 de forma inmediata y otras 11 por quemaduras después de ser llevadas a instalaciones médicas de los alrededores.

“Muchos de los cuerpos fueron calcinados a un nivel en el que es imposible reconocerlos”, dijo Reynolds, quien tiene Kinshasa como base. “Es una escena terrible, y una tragedia”, añadió, “para gente que ya no tenía mucho para empezar”.

Mounoubai dijo que al menos una docena de casas cerca del lugar del accidente quedaron destruidas.

VIVIENDAS DE HOJAS SECAS Y BARRO
La mayoría de gente de la zona vive en chabolas hechas con hojas secas y barro endurecido.

Gente desesperadamente pobre en Congo — un país que aún intenta recuperarse de una guerra civil que duró desde 1998 hasta el 2002 — suele apresurarse a llegar a camiones cisterna que derraman petróleo en carreteras y caminos, cargando con cubos de plástico, sin darse cuenta de la peligrosidad que representaba eso.

El conductor del camión, que provenía de Tanzania, resultó herido, pero salió con vida del accidente.

El número de muertos aumentará probablemente, pues varios de los heridos sufren graves quemaduras.

Un portavoz del Gobierno local cifró las víctimas en 199 fallecidos y 212 heridos.