El lago, considerado el segundo más grandes después del Enriquillo, ha inundado las oficinas de Aduanas y de Migración, así como el departamento de Sanidad Vegetal y Animal del Ministerio de Agricultura, el cuartel del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfrot), comercios, el espacio en donde se desarrollan las ferias y mercados, así como la carretera que comunica a República Dominicana con Haití.

La resolución marcada con el número 5 del 2010, cita en uno de sus considerandos que el crecimiento del lago del Fondo o Azuei ha inundado de manera “dramática” la zona de Mal Paso y con ello ha alterado la vida normal y el desenvolvimiento público y privado de personas e instituciones.

Resolución
“Mal Paso es el punto de confluencia más importante en las relaciones bilaterales de diversas índoles tales como comerciales, geopolíticas, solidarias, humanas, migratorias y otras, en donde además se encuentran instaladas importantes oficinas recaudadoras y de control fronterizo”, indica la resolución fechada el pasado miércoles 9 de este mes.

Autoridades y organizaciones de la provincia, dentro de las que encontraban Malcolm Santana gobernador de Independencia, Donny Santana, encargado de la Oficina Provincial de la Dirección de Desarrollo Fronterizo, así como autoridades policiales, de las Fuerzas Armadas y comerciantes de la comunidad afectados por el crecimiento del lago, apoyaron la resolución.

Por Mal Paso se estima que pasa la mayoría de carga de exportación dominicana hacia Haití, además de las mercancías de ayuda internacional para asistir a los ciudadanos de esa nación afectados por el terremoto del pasado 12 de enero. Esta localidad está a sólo 53 kilómetros de distancia de Puerto Príncipe, capital haitiana y a 333 kilómetros del Distrito Nacional.

La falta de intervención a tiempo de las autoridades y tratamiento de ese lugar, podría dejar incomunicada a República Dominicana con el vecino Haití, vía de acceso más fácil y rápida entre las dos naciones.

Una carretera
El lago del Fondo o Azuei está creciendo y las aguas de otros afluentes y poco a poco cubriendo la carretera que sirve como única vía de comunicación de la zona con Haití. La solución definitiva implicará la construcción de una carretera en forma de desvío que pase por otra área y deje a un lado el crecimiento natural del lago.

El problema es que se requiere de inversiones millonarias para esos fines, que deberán salir del Estado dominicano, no sólo porque Haití no está en condiciones económicas para hacer ninguna inversión y porque el mayor problema se presenta del lado dominicano, sino también porque son los criollos los más beneficiados del comercio bilateral.

En caso de que se afecte la comunicación terrestre por Jimaní hacia Haití, los productores y empresarios dominicanos serían los más perjudicados económicamente.

TRABAJOS DE RELLENO
HAY TEMOR
En la actualidad se realizan rellenos a orillas de la carretera que comunica a República Dominicana con Haití para permitir que los vehículospuedan avanzar.

Sin embargo, pese a la inundación que ha causado el lago Azuei a las oficinas desde hace algún tiempo, las nuevas edificaciones en esa área están corriendo el mismo riesgo La comunidad pide a las autoridades que ayude a desviar la carretera que comunica esta parte con el vecino país de Haití, vía que cada vez se reduce más debido al avance de las aguas del lago.

El temor a que se produzcan daños a la salud, obligó al Ayuntamiento Municipal de Jimaní a declarar en estado de emergencia el puerto fronterizo del Mal Paso, debido a la penetración del lago cada ves que llueve.

El derrame de aguas ha hecho daño también a la económica de esta zona, donde los más perjudicados son los comerciantes de ambos países que ven casi sumergidas sus casetas.